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  • 04
    nov.
    Acondicionamiento exterior / por : Raquel

    5 CONSEJOS PARA CUIDAR Y PROTEGER EL JARDÍN DEL FRÍO

    5 CONSEJOS PARA CUIDAR Y PROTEGER EL JARDÍN DEL FRÍO

    Que bajen las temperaturas y los días se acorten no implica que tengamos que despedirnos de nuestro jardín. Con estos 5 consejos, podrás cuidar, proteger (y como no, disfrutar) de tu espacio exterior también durante los meses más fríos. ¡Apunta!

    1. Limpia las plantas y recoge las hojas:

    Lo sabemos, recoger hojas y retirar plantas secas no es la tarea más divertida del mundo, pero mantener el suelo y tierra limpios te ayudará a mantener tus plantas fuertes y libres de enfermedades. Y es que, de no hacerlo, la acumulación de hojas puede llegar a impedir el paso de la luz tan necesario para las raíces de las plantas, incluso fomentar la proliferación de hongos y otras enfermedades a causa del exceso de humedad. 

    Para hacerte la tarea mucho más cómoda y llevadera, alíate con un saco de jardín. Los hay de muchos tipos: con asas reforzadas, con más y menos capacidad o con estructuras que los mantienen erguidos mientras trabajes con ellos. Todos ellos son muy ligeros y resistentes (durarán varias temporadas), pero lo mejor de estos sacos es que son tremendamente prácticos cuando se necesitan y cuando no, prácticamente no ocupan lugar de almacenaje.

    2. Elimina las malas hierbas y protege el suelo:

     

    Las bajas temperaturas, las heladas o la humedad excesiva son algunos de los factores que más dañan nuestros espacios exteriores durante el invierno. En particular, las raíces de las plantas y arbustos son las que más sufren los estragos del frío, por lo que desde Nortene te recomendamos que las cubras con una base de mulching o una malla anti-hierbas, que actuará como capa de protección extra manteniéndolas aisladas del frío y permitiendo el paso de la luz y del agua.

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    3. Cubre y resguarda tus plantas más delicadas:

    Si tienes plantas delicadas y no puedes moverlas con facilidad, ¡no lo dudes! cúbrelas con films o velos de hibernación. Su alta capacidad térmica las protegerá de condiciones extremas como la humedad, la escarcha, el hielo o la nieve. No olvides que estos velos también son permeables por lo que permiten el paso del aire y de la luz, lo cual unido a la temperatura estable favorece el crecimiento de la planta. Además, estas fundas de hibernación se adaptan a cualquier tipo de planta, y resultan muy fáciles de instalar. Una vez pase la época más fría, podrás retirarlos y guardarlos para utilizar de nuevo la próxima temporada.

    Si tienes planteles, bulbos o plantas en tiestos o macetas pequeñas que puedas mover con facilidad, búscales un sitio resguardado o utiliza un invernadero. Nuestros favoritos son los de pequeño formato, porque no ocupan mucho espacio – por lo que son perfectos para balcones o patios pequeños – y cumplen con su objetivo principal: mantener un clima templado y estable a cobijo de la humedad.  

    >> Te contamos más sobre los invernaderos

    4. Protege el mobiliario de exterior:

    Igual que necesitamos abrigarnos más durante los meses más fríos, el mobiliario de exterior también necesita una protección extra. En este sentido, protegerlos con fundas de mobiliario es una forma fantástica de garantizar su conservación durante mucho más tiempo. Eso sí, ¡no todas valen!: asegúrate que no sólo sean impermeables, sino que además estén fabricadas con un tejido transpirable con protección anti-UV e incluyan un buen sistema de fijación para que no salgan volando con una racha de viento.

    5. Y lo más importante… ¡Diviértete!

    El otoño y el invierno son estaciones ideales para divertirse y relajarse en el jardín. Por ejemplo, es una época fantástica para empezar con un huerto urbano, ya que las bajas temperaturas permiten espaciar más los riegos, las plagas dan un respiro y los cultivos de temporada crecen prácticamente solos. Elige un rincón con algunas horas de sol y un recipiente en el cual quieras emplazar tu huerto urbano. Los hay para todo tipo de espacios, desde una maceta de madera (actuará como aislante del frío y del calor en verano) o mesas o cajones de cultivo, ideales si quieres cultivar con los más peques de la casa. Una vez tengas la estructura montada, añade sustrato, planta las semillas que te apetezca cultivar (selecciona aquellas que sean de temporada) y riega. 

    Sin duda, estarás practicando una de las aficiones más sanas, divertidas y reconfortantes que existen.  

    >> Todo lo que necesitas saber para preparar un huerto urbano.

     

    Si bien es cierto con la llegada del otoño y la bajada de las temperaturas, el tiempo que pasamos al aire libre se reduce drásticamente, pero aunque pasemos menos tiempo en el jardín hay muchas cosas que podemos hacer para mantenerlo en las mejores condiciones. Para ayudarte, hemos preparado una selección de productos ideales para abrigar tu espacio exterior, ¡a unos precios que te dejarán helad@! 

     

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